Este domingo, Enzo Fernández se convirtió en el primer futbolista en la historia en lograr una hazaña inédita: consagrarse campeón del mundo tanto con su selección como con su club. La victoria del Chelsea sobre el París Saint-Germain en la final del Mundial de Clubes selló un título que lo pone en una categoría exclusiva.
Con apenas 23 años, el mediocampista argentino sumó un trofeo que ningún otro jugador ha conseguido: campeón del mundo con la camiseta de su país —en Qatar 2022— y campeón del mundo a nivel de clubes —con Chelsea en 2025—.
El dato es tan impactante como inédito. En un deporte con más de un siglo de historia, grandes figuras han levantado la Copa del Mundo y otros tantos han ganado el Mundial de Clubes o la extinta Copa Intercontinental. Pero nadie lo había hecho en ambas competencias.
El partido, disputado con alta tensión ante un PSG repleto de estrellas, coronó al equipo inglés con Enzo como una de las piezas claves. El joven que surgió de River y brilló en Benfica no deja de sumar capítulos gloriosos a su carrera.
Hoy, Enzo Fernández es el único que puede decir que lo ganó todo. Con su país. Y con su club.