El programa Cordobeses en Alerta cerró noviembre con un nivel sostenido de actividad, registrando 5.071 avisos en la ciudad de Córdoba. A partir de estos reportes, los móviles policiales lograron intervenir rápidamente y detener a 147 personas señaladas por los vecinos.
Durante el mismo período se concretaron 103 secuestros de vehículos y se incautaron 24 armas, entre armas de fuego, réplicas y elementos cortantes. Además, el sistema brindó asistencia directa en 36 situaciones de urgencia médica o doméstica, reafirmando su función como herramienta de atención inmediata ante emergencias.
Con más de un año de funcionamiento, el programa se consolidó como un mecanismo clave de prevención temprana y coordinación policial. La experiencia demuestra que la articulación entre operadores, fuerzas de seguridad y ciudadanía resulta decisiva para mejorar la respuesta en los barrios, modelo replicado también en localidades como Villa Carlos Paz, donde los canales de alerta vecinal cumplen un rol semejante.
Actualmente, 144 barrios forman parte de Cordobeses en Alerta, lo que conforma una red de más de 93.000 vecinos conectados que colaboran activamente en la construcción de entornos más seguros.
El servicio funciona mediante WhatsApp, permitiendo el envío de mensajes, audios, fotos, videos y ubicación en tiempo real. Los operadores reciben cada alerta, realizan el seguimiento del caso y articulan la intervención correspondiente. A diario ingresan entre 130 y 140 notificaciones, reflejo del uso sostenido del sistema y de la confianza de la comunidad.
Los móviles policiales asignados a cada zona reciben las alertas en forma directa, lo que permite verificar personas sospechosas, realizar controles preventivos, patrullar zonas sensibles, secuestrar armas cuando corresponde y asistir en emergencias. El programa también articula con Bomberos, servicios de salud y equipos municipales y provinciales en situaciones que lo requieren.
Cordobeses en Alerta continúa creciendo y depende de la participación activa de los vecinos. Cada mensaje enviado no sólo activa la respuesta de un equipo operativo, sino que también expresa el compromiso comunitario por mejorar la seguridad cotidiana. El programa es gratuito, confidencial y protege la identidad de quienes realizan los reportes.
