La venta de una vivienda puede verse afectada por factores varios. Desde el Consejo Directivo del Colegio Inmobiliario de Buenos Aires agregan que la mayor dificultad que enfrenta una propiedad a la hora de ser vendida son aquellas ubicadas en zonas inseguras, y departamentos internos sin vista, ni luminosidad.
Por otro lado, las unidades que se encuentran en el último piso con ascensor hasta el anteúltimo presentan demoras para la venta debido a la incomodidad de subir un tramo por escalera.
Aunque ofrecen mayor privacidad, esta característica puede desalentar a muchos compradores, especialmente aquellos que buscan acceso total.
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Otro tipo de mueble que enfrenta dificultades en el mercado es el que no califica como Apto crédito hipotecario.
Desde el sector inmobiliario agregan que las propiedades de alto valor y que no aceptan financiación se vuelven más difíciles de vender.
Las propiedades en torno a los 100 mil dólares suelen ser las más accesibles para los compradores.
El perfil del inversor de este tipo de inmuebles son aquellos que tienen moneda extranjero en efectivo y buscan aprovechar la baja demanda para cerrar una buena operación.
Desde el mercado agregan que en estos casos, la estrategia de venta debe contar con una tasación real y mostrarle al propietario los beneficios de cerrar la venta en un mercado competitivo.